El cuarto es cómodo, con bebidas y también una cama grande y cómoda. El servicio del hotel es de primera categoría.

La ubicación del Ritz-Carlton es perfecta para explorar Viena a pie, cerca de la Ópera y la Catedral. La habitación en la que me alojé era moderna y no le faltaba detalle, con un baño fantástico. El desayuno era amplio y tenía horario extendido.

El personal del desayuno era un poco lento y descuidado, cometiendo errores al tomar las comandas. También eché en falta opciones veganas en los restaurantes.

El hotel era magnífico y maravilloso, aunque estuve solo 3 días. Me han gustado mucho de verdad lala amabilidad del personal. Tenía una habitación muy espaciosa, moderna, con un balcón y una cama de matrimonio, dormí muy bien. Tenía una ubicación increíble, a una distancia moderada de la Catedral de San Esteban de Viena. En las proximidades del centro, también del centro de la ciudad. Los desayunos eran saludables y el servicio útil. Mi experiencia aquí ha sido excelente.

Sirvieron un desayuno caro, podría ser mucho mejor.

El personal parecía muy amistoso. La habitación era sorprendentemente nueva y lo suficientemente espaciosa y como tenía almohadas de plumón y almohadas hipoalergénicas, dormí como un bebé. El desayuno fue saludable, el registro fue anticipado.

Desde el momento en que llegué, fui recibido con un servicio impecable por parte del personal atento y amable. Las habitaciones eran espaciosas y lujosas, con todas las comodidades que uno podría desear. El spa y centro de bienestar ofrecía una amplia gama de tratamientos y servicios exclusivos, que me permitieron relajarme y rejuvenecer por completo. pude disfrutar de la piscina cubierta y sauna, que eran de excelente calidad. La ubicación del hotel era inmejorable, ya que estaba cerca de todas las atracciones principales. Definitivamente recomiendo este hotel para una experiencia de lujo y comodidad.

Hubo un pequeño inconveniente durante mi estancia. En el desayuno, encontré que la variedad de alimentos ofrecida era un poco limitada y los precios eran algo elevados.

La ubicación era increíble y estupenda, la Estación de Stadtpark estaba relativamente cerca del hotel. Las habitaciones eran lo suficientemente espaciosas y enormes, con una cama grande y cómoda, un balcón. La piscina era muy bonita y el personal complaciente.

La ubicación es inmejorable, ya que está muy cercana al centro de la ciudad y a las principales atracciones. El personal del hotel fue excepcional, siempre atento y servicial. Además, el desayuno fue espectacular. Definitivamente, cuando volvamos a esta ciudad, este hotel será nuestra primera opción.

Todo estuvo bien.

Me ha gustado que estaba impecable y era magnífico, el personal era brillantemente servicial y las habitaciones modernas. La cama era cómoda, el baño enorme y había un minibar, una caja fuerte y una mesa de trabajo en la habitación. La ubicación era bonita, la Viena estaba a poca distancia andando del hotel. El bar en la azotea fue una deliciosa sorpresa

El desayuno era decepcionante, podría ser mejor.

La limpieza impecable y las instalaciones del hotel son excelentes. El desayuno es fantástico con una amplia variedad de opciones. El personal es muy atento y servicial en todo momento. Además, la ubicación es perfecta, cerca de todos los principales lugares de interés y en el centro de la ciudad.

Nada, todo excelente.

Ubicación perfecta cerca de la Ópera y la Catedral

Suite moderna y bien decorada. Fantástico baño y techos altos.- Personal atento y servicial.- Desayuno variado y horario conveniente.- Spa y gimnasio excelentes.- Habitaciones limpias y cómodas.- Personal amable y servicial

Una ubicación muy buena, la mejor y tranquila, no muy lejos de varios sitios y también de principales atracciones, un servicio agradable. Habitaciones nuevas y muy bien amuebladas con instalaciones como un minibar, una caja fuerte personal y una mesa de trabajo.

Una cama súper cómoda, un hotel muy limpio en una ubicación perfecta. El personal era complaciente y extremadamente amable, la habitación era de buen tamaño. ¡Servicios increíbles! Check-in sin problemas. Restaurante estupendo con vistas estupendas.

Me encantó mi estadía en este hotel durante la Navidad. Los mejores aspectos fueron la amabilidad del personal, quienes estuvieron siempre atentos y dispuestos a ayudar. Además, las instalaciones del hotel eran impecables, especialmente la piscina y el spa donde disfruté de relajantes masajes.

Este es nuestro hotel favorito en Viena, el personal es cortés. Tomar el desayuno en el restaurante es muy cómodo. La cama era genial como se esperaba. También tenía una piscina fantástica...

el personal fue muy muy amigable y agradable. la habitación ofrecía una vista maravillosa al jardín.